Un día en los mercados flotantes de Borneo
Suena el despertador…. Es poco menos de las cinco de la mañana. Tras pasar por el debido aseo, colgamos a la espalda nuestras mochilas. Un tipo sonriente y regordete ataviado con una especie de chaqueta militar de camuflaje nos espera en la recepción de nuestro hotel. Tras una corta charla …